¿Quieres aprender sobre el cultivo de narcisos? Te damos consejos de plantación, cuidado y mantenimiento para disfrutar de hermosas flores en primavera.
Los narcisos son una planta bulbosa popular en los jardines debido a sus flores brillantes y coloridas que aparecen en la primavera. Estas flores vienen en una amplia variedad de formas y colores, que van desde el clásico amarillo brillante hasta tonos de rosa, naranja, blanco y bicolor.
Uso en jardinería y paisajismo
Además de su belleza ornamental, los narcisos son una excelente opción para añadir al jardín debido a su bajo mantenimiento y facilidad de cultivo.
Son plantas resistentes que se adaptan bien a una amplia variedad de condiciones de crecimiento y son capaces de sobrevivir en climas fríos y cálidos.
El cultivo de narcisos es una buena opción para los jardines naturales y ecológicos, ya que atraen a abejas, mariposas y otros polinizadores importantes. También son resistentes a la mayoría de las plagas y enfermedades comunes de los jardines.
Además de su uso en el jardín, los narcisos también son populares como flores cortadas para arreglos florales y ramos. A menudo se utilizan como regalos de primavera, y se les asocia con el renacimiento y la renovación.
Como plantar narcisos
Elección de la ubicación
Los narcisos prefieren un lugar soleado o parcialmente sombreado en el jardín, con un suelo bien drenado. Es importante elegir un lugar en el que el agua no se acumule en exceso, ya que esto puede hacer que los bulbos se pudran.
Preparación del suelo
Antes de plantar los bulbos, es recomendable cavar el suelo a una profundidad de aproximadamente 30 centímetros, y mezclar un poco de abono orgánico y arena para mejorar la calidad del suelo y su capacidad de drenaje.
Si quieres plantarlos en maceta te recomendamos revisar nuestro post de preparación de sustrato para bulbos.
Plantación de los bulbos
Los bulbos de narciso deben plantarse a una profundidad de aproximadamente 10 centímetros y separados entre sí a una distancia de unos 10-15 centímetros. Esto es con la punta hacia arriba y la raíz hacia abajo.
Riego
Después de plantar los bulbos, es importante regar el suelo para asegurarse de que esté húmedo, pero sin encharcamientos. Es importante no regar en exceso, ya que esto también puede hacer que los bulbos se pudran.
Como cuidar las plantas de Narcisos
Fertilización
Puedes agregar un poco de abono orgánico al suelo al comienzo de la temporada de crecimiento, lo que ayudará a proporcionar los nutrientes necesarios a la planta. También puedes aplicar un fertilizante con bajo contenido de nitrógeno después de que las flores se hayan marchitado, lo que ayudará a alimentar los bulbos y prepararlos para la próxima temporada.
Mantenimiento
El cultivo de narcisos es de bajo mantenimiento, pero es importante quitar las flores marchitas para evitar que la planta dedique energía a producir semillas en lugar de a la formación de bulbos para la próxima temporada. También debes esperar a que las hojas se marchiten por completo antes de cortarlas, ya que esto permitirá que la planta absorba todos los nutrientes necesarios para la próxima temporada de crecimiento.
Control de plagas y enfermedades
Los narcisos son resistentes a la mayoría de las plagas y enfermedades comunes de los jardines. Sin embargo, si notas algún problema, como manchas en las hojas o tallos, debes retirar las hojas afectadas y desecharlas lejos del jardín para evitar la propagación de enfermedades.
¿Qué hacer con los bulbos después de la floración?
Después de que las hojas de la planta de narcisos se hayan marchitado por completo, es importante dejar que la planta absorba todos los nutrientes posibles antes de retirar los bulbos del suelo. Esto se debe a que los nutrientes almacenados en los bulbos son esenciales para el crecimiento de la planta la próxima temporada.
Una vez que las hojas se hayan marchitado por completo, puedes desenterrar los bulbos cuidadosamente y retirar el exceso de tierra. Luego, debes almacenar los bulbos en un lugar seco y fresco hasta que estén listos para ser replantados en el otoño. Asegúrate de separar los bulbos más grandes de los más pequeños y de eliminar cualquier bulbo que esté dañado o enfermo.
Si decides guardar los bulbos durante un período prolongado, es posible que debas revisarlos periódicamente para asegurarte de que no se hayan secado demasiado o estén mohosos.
Si quieres comprar bulbos, en nuestra tienda tenemos espectaculares packs de bulbos en oferta!
Variedades de Narcisos
Existen varios tipos de narcisos, cada uno con sus características únicas en cuanto a tamaño, forma, color y floración. Algunos de los tipos de narcisos más comunes son:
Trompeta: Con una trompeta larga y estrecha en el centro de la flor y pétalos amplios y planos alrededor.
Doble: Con flores grandes y dobles con múltiples capas de pétalos en tonos de blanco, amarillo y naranja.
Junquillo: Con flores pequeñas y fragantes en tonos de amarillo y blanco, con múltiples flores en cada tallo.
Bulbocodium: Con una flor en forma de copa y un cáliz corto, tienen una apariencia similar a una lágrima invertida.
Miniatura: Con flores pequeñas y delicadas en tonos de amarillo y blanco, tienen una apariencia similar a la de las flores de primavera silvestres.
Estos son solo algunos de los tipos de narcisos que existen. Hay muchas otras variedades disponibles en diferentes tamaños, formas y colores.